Las altas temperaturas hacen crecer exponencialmente los deseos de poder darse un chapuzón. Con la llegada del calor, comienza la impaciencia para tener preparada la piscina lo antes posible. Un trabajo vital que se puede resumir en cuatro grandes procesos: limpieza, revisión, puesta a punto del agua y mantenimiento.

Limpieza

Como era de esperar, los meses en los que no se ha utilizado la piscina han hecho mella en ella. Tanto si has manteniendo el agua durante el invierno como si no, lo primero es una limpieza general.

1 - Limpieza del interior

Ha llegado el momento de limpiar el revestimiento de la piscina con un cepillo recto o curvo y agua jabonosa. Puedes aprovechar que esté prácticamente vacía para hacer una limpieza a fondo o lavar esa zona que queda a la vista, ya sea porque haya bajado el volumen del agua o hayas evacuado unos litros antes de arrancar.

También será interesante ocuparse del fondo mediante el pase diario (al menos durante una semana) del limpiafondos, ya sea manual, hidráulico o un robot de limpieza.

2 - Limpieza de los filtros

Para el buen funcionamiento del sistema de filtrado es imprescindible realizar una limpieza a conciencia de los diferentes elementos como los filtros, el skimmer, los dispensadores, las rejillas, etc.

Si la depuradora tiene un filtro de arena, es más que recomendable realizar un contralavado, invirtiendo el sentido del agua, para la expulsión de los residuos que se hayan podido quedar en la arena. Una vez realizado este proceso, quizás también sea necesario cambiar o reponer algo de arena.

Si por otro lado, la depuradora es de cartucho, será buena una limpieza con agua a presión o incluso el cambio del mismo.

3 - Limpieza de la zona circundante

Tan importante es el interior como la zona cercana a la piscina, ya sean duchas, escaleras o bordes. Todo necesitará ser desinfectado antes de que los usuarios se paseen alegremente descalzos.

Revisión

Como todo sistema mecánico, el paso del tiempo y su exposición a las inclemencias del tiempo, pueden haber comprometido alguna de sus piezas.

4 - Comprobaciones

Seguramente sea tedioso, pero el paso más importante será la revisión del mecanismo, asegurándose de que no hay óxido o acumulación de cal y que todas las partes están conectadas donde deberían y en buen estado.

5 - Realización de pruebas

En este punto sería recomendable la puesta en marcha de la depuradora, dejándola funcionar durante un día completo. De esta forma, se podrán apreciar fugas o posibles problemas en el funcionamiento. Este proceso también ayudará a empezar a limpiar el agua que se utilizará después.

6 - Subsanación de inconvenientes

Una vez realizado ese chequeo inicial, será el momento de subsanar todos los posibles contratiempos. Dejando cada uno de los mecanismos en perfecto estado de revista.

Puesta a punto del agua

La piscina ya casi está, pero hace falta lo más importante, el agua. Tanto sí has hecho invernaje como si vas a llenar la piscina por completo de nuevo, serán necesarios ciertos tratamientos iniciales.

7 - Rellenar el agua

Este es el momento de rellenar el agua hasta el nivel deseado. Haya sido por la evaporación, la propia limpieza o la decisión de vaciado casi completo, es prácticamente seguro que a la piscina le faltarán unos litros más para llegar al nivel esperado.

8 - Saneamiento del agua

Llega el que para muchos sería el paso inicial y que sin embargo es mejor dejar como penúltimo proceso, el saneamiento del agua. El proceso comenzará con la aplicación del cloro. Para esta primera actuación y dependiendo del estado inicial del agua, puede que lo recomendable sea apostar por uno de acción rápida para luchar a la vez contra algas, bacterias y hongos.

9 - Análisis del pH de la piscina

El último paso antes de zambullirse consiste en medir el pH del agua mediante un sencillo kit. Un pH óptimo estará entre 7,2 y 7,6. Si los valores están por encima, será necesario aplicar un producto reductor de cloro. En el caso de que se encuentre por debajo, habrá que añadir un poco más de este químico.

Mantenimiento

10 – Mantenimiento semanal

Pese a que este último proceso no pertenece estrictamente a la puesta a punto en sí, será vital para aprovechar todo el trabajo previo y asegurar el buen funcionamiento de la piscina.

Además de una adecuada limpieza mediante los cepillos especiales o la depuración continuada, es indispensable la utilización del cloro en el skimmer. También es posible la ayuda a problemas específicos como la proliferación de algas.

Disfrutar del verano

Después de todo el trabajo, ahora ya sólo queda relajarse y disfrutar del verano lo más refrescante posible.

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